Kinesiología y rehabilitación

Lic. Césa Burgos

Área de kinesiología, fisiatría y rehabilitación

El tratamiento kinésico dentro del equipo de dolor está destinado a favorecer la disminución de síntomas, reinserción social/laboral y prevención de la discapacidad que pudiera surgir como consecuencia de la afección de origen. Para ello se utilizaran técnicas manuales, técnicas de reeducación, rehabilitación funcional, Acupuntura, entre otras. Con el deseo de mejorar la calidad de vida de los pacientes.

El principal instrumento de trabajo que tenemos son nuestras propias manos, secundado por el método o técnica que se aplique para la evaluación, diagnóstico y tratamiento. La selección de cada una de ellas será de acuerdo al requerimiento de cada paciente.

Las técnicas de Terapia Manual son técnicas específicas para el tratamiento del dolor y otros síntomas de disfunción neuro-músculo-esquelética de la columna vertebral y de las extremidades, que se caracterizan por ser aplicadas manualmente y/o de forma instrumental.

Estas, tienen como principales objetivos:

  • Recuperar el movimiento cuando las articulaciones presentan una restricción en el mismo.
  • Aliviar el dolor articular y muscular y, de forma inmediata mejorar la funcionalidad del individuo.

Entre ellas encontramos:

  • Masaje terapéutico.
  • Liberación de puntos gatillo, mediante técnicas de compresión isquémica o intermitente.
  • Facilitación neuromuscular propioceptiva.
  • Estiramientos (simples, tensión activa, inervación recíproca).
  • Manipulación de fascias.

Reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1979,
la acupuntura es una técnica milenaria originaria de la medicina tradicional china que tiene como finalidad la restauración del equilibrio de nuestro cuerpo, tratar enfermedades y promover la salud.

El procedimiento consiste en la colocación de agujas de acupuntura en los llamados “puntos de acupuntura” los cuales estimulan las terminaciones nerviosas existentes en la piel y en otros tejidos, enviando de esta forma mensajes al cerebro, desencadenando diferentes efectos en el cuerpo como acción analgésica o antiinflamatoria.
Se emplean agujas metálicas muy finas y pulidas, de diferentes longitudes y calibres dependiendo de la zona que haya que punturar. Son estériles y desechables. En una sesión normal, se suelen utilizar de 10 a 12 agujas cuya inserción es prácticamente indolora.

Si bien numerosas afecciones pueden tratarse con éste tipo de terapia, es el tratamiento del dolor el motivo más frecuente de consulta.

La rehabilitación funcional comprende el conjunto de actividades, procedimientos e intervenciones destinadas a desarrollar, mejorar, mantener o restaurar la capacidad funcional física, psicológica, mental o social para que las personal puedan desempeñarse adecuadamente en su ambiente físico, familiar, social y laboral. La rehabilitación funcional le ayudará a cada individuo a alcanzar su máximo potencial e independencia.